Las emociones y los sentimientos

Las emociones y los sentimientos son parte del ser humano desde que nacen hasta el último segundo de vida que se advierte en el cuerpo. . .

Según las etapas de crecimiento los sentimientos se manifiestan de una forma u otra. Cuando somos bebés la ausencia del poder comunicarnos, nos hace depender totalmente de ellos, y además, sin saberlo, estamos obligados a mostrarlos a todo el mundo para lograr lo que queremos.

Pasan los años y la vida nos enseña que lo que tan fácil nos parecía conseguir hasta ahora mostrándonos al cien por cien como humanos, comienza a complicarse más de lo que pensábamos y nos encontramos ante una de las primeras decisiones importantes que tomar: mostrarlos o no mostrarlos.

Esta decisión influye en nuestra formación como personas, pero como niños que somos la mayoría de veces somos incapaces de controlarlos y nos exponemos al mundo. . . el tiempo va dando nuevas formas a nuestro cuerpo y los adolescentes aprenden de sus mayores la mayor lección de la vida; las emociones, los sentimientos son únicos en cada ser y demasiados peligrosos para mostrarlos en cualquier momento. Algunos, aprendemos a controlarlos tan bien que apenas parece que estén presentes y se comienza con las estúpidas críticas hacia quienes no aprendieron tan bien como tú.

Cuando la adolescencia nos abandona suele dejarnos un sentimiento de sequedad en la boca, pero comienza otra época donde dejamos que nos importen otras cosas. Las emociones vuelven a resurgir , dejamos que las personas que nos rodean nos conozcan un poco mejor y sentimos menos miedo al rechazo de nuestra persona. Comienzan los años en que uno puede sentirse un poco más libre, y digo un poco porque nunca te sentirás tan libre como cuando no entendías nada de lo que veías, olías o hacías.

Personalmente, siempre pensé que demostrar lo que soy o como soy a los demás traería problemas. Las burlas que alguna vez siendo niños nos hicieron, pudieron influenciar de una forma u otra, y aunque supongo que tuve las mismas que cualquier otro niño, pienso que a mí si que me enseñaron a esconderme como persona.

Y como buena adolescente, la bordería se unió a la falta de emociones, mostrándome a los demás como una persona seca, caprichosa, fría y distante. Pero los años pasan para todos y las personalidades cambian, o eso dicen.

A mis veinticinco casi, yo, sigo teniendo miedo a mostrar mis emociones y pienso que si pudiera evitar sentir las cosas que siento algunas veces, si pudiera . . . las erradicaría, porque para mí los sentimientos y las emociones nos hacen débiles ante los demás.

Es mi primer texto en el Blog y espero vuestras opiniones. No seais muy malos conmigo.

¿Ocultáis vuestros sentimientos?

Besos a todos: . . .Jhoy

Muchas gracias Jhoy. . . y no te preocupes de las opiniones de la gente del Blog que todos son muy: maj@s, simpatic@s, sensibles, educad@s, buen@s, cariños@s, etc, etc, etc. . . je je je