Me leí este libro por curiosidad.
Una amiga estaba pasando “por momentos malos” y acudía semanalmente a un psicólogo. Así que todas las semanas la preguntaba qué es lo que la decía para “ayudarla” (curiosidad mía). Ella me contaba lo que la preguntaba y los consejos que la daba. A parte de consejos también la mandaba deberes: Por ejemplo; leer este libro.
Cuando termino de leérselo, me hablaba diariamente de él. Y aunque su “recuperación” llevo más tiempo que la lectura de un libro, consiguió que mi curiosidad me dijera: “Tienes que leerte ese libro”. . . así que se lo pedí y me lo leí. . .
Lo considero un libro curioso, y eso que muchas veces, mientras lo leía, pensaba: “que me está diciendo el subnormal este”. . .
Sobre todo me llamo la atención como definía a las personas dependientes . . . y me llamo la atención la forma en los que los catalogaba (de una forma muy poco educada) . . . estos son los párrafos que más me llamaron la atención:
“Existen distintas clases de imbéciles.
Los imbéciles intelectuales, que son aquellos que creen que no les da la cabeza (o temen que se les gaste si la usan) y entonces le preguntan al otro: ¿Cómo soy? ¿Qué tengo que hacer? ¿Adónde tengo que ir? Y cuando tienen que tomar una decisión van por el mundo preguntando: “Vos ¿qué harías en mi lugar?”. Ante cada acción construyen un equipo de asesores para que piense por ellos.
Como en verdad creen que no pueden pensar, depositan su capacidad de pensar en los otros, lo cual es bastante inquietante. El gran peligro es que a veces son confundidos con la gente genuinamente considerada y amable, y pueden terminar, por confluyentes, siendo muy populares. (Quizás deba dejar aquí una sola advertencia: Jamás los votes.)
Los imbéciles afectivos son aquellos que dependen todo el tiempo de que alguien les diga que los quiere, que los ama, que son lindos, que son buenos.
Son protagonistas de diálogos famosos:
—¿Me querés?
—Sí, te quiero...
—¿Te molestó?
—¿Qué cosa?
—Mi pregunta.
—No, ¿por qué me iba a molestar?
—Ah... ¿Me seguís queriendo?
(¡Para pegarle!)
Un imbécil afectivo está permanentemente a la búsqueda de otro que le repita que nunca, nunca, nunca lo va a dejar de querer. Todos sentimos el deseo normal de ser queridos por la persona que amamos, pero otra cosa es vivir para confirmarlo.
Los varones tenemos más tendencia a la imbecilidad afectiva que las mujeres.
Y por último...
Los imbéciles morales, sin duda los más peligrosos de todos. Son los que necesitan permanentemente
aprobación del afuera para tomar sus decisiones. El imbécil moral es alguien que necesita de otro para que le diga si lo que hace está bien o mal, alguien que todo el tiempo está pendiente de si lo que quiere hacer corresponde o no corresponde, si es o no lo que el otro o la mayoría harían. Son aquellos que se la pasan haciendo encuestas sobre si tienen o no tienen que cambiar el coche, si les conviene o no comprarse una nueva casa, si es o no el momento adecuado para tener un hijo. “
Al terminar el libro comprendí, o creo que comprendí, lo que quería decir y la forma en la que los quería
ayudar. . .
No desvelo más. . .: a leérselo!!! Aunque no estéis en la situación.
Besos
Jim
“Decir cosas buenas de uno mismo es una presunción, pero decir algo malo de uno mismo es una imbecilidad”
Yo me leí otros dos libros de este señor que se llamaban "20 pasos hacia delante" y "cuentos para pensar", el primero fue un regalo y el segundo recomendación d euna amiga y bueno, no me han disgustado la verdad... Son libros como de autoayuda y no están mal del todo...
ResponderEliminarJoe Jim... creo que se me van acumlar los libros pendientes que tengo que leer!! no voy a dar a basto... este le tienes tu?? Creo que amí me haría falta... :P
ResponderEliminarBesitos locos/as
Hooola guapisimo, ves? ya estoy por aquí!!
ResponderEliminarYo he intentado leerme algún libro de éstos pero soy incapaz, me canso en la tercera pagina, pero intentaré ojear éste a ver que tal, pero despues del de Los renglones torcidos de Dios que lo he intentado varias veces pero no hay manera aunque ya me ha picado la curiosidad. Por cierto has leido La sombra del viento, creo que te gustaria.
Un besito muy grande y para Sonia y Anye, que me alegro mucho que os lo hayais pasado tan bien por Londres. Si llegais a ir un mes antes coincidimos allí. Que pena!!
Los libros de Jorge Bucay, no son libros como para mmmm "leérselos". . . (haber si me explico). . .yo no cogería un libro de este hombre y diría: "mira que bien, me lo voy a leer" en plan disfrute, porque considero que hay muchísimos libros mejores para disfrutar. Pero si que recurriría a este autor en busca de otro punto de vista, que es para lo que sirven.
ResponderEliminarEste me lo leí, por mi compañera de curro, que quería comprender por lo que estaba pasando y ayudarla de alguna forma.
Bueno Mari, que no te leas este y que te termines los "renglones torcidos de Dios" eh???, jajaja.
Besos.
En el 2005 ya fué record en ventas en todo el mundo más de 1.000.000 de copias vendidas.
ResponderEliminarYo considero que......., "A un autodependiente solamente lo manejas si él quiere.
Y ser persona es darme a mí mismo la libertad de ser el que soy....
Terminamos forzándonos a ser lo que no somos, o a estar en donde no queremos estar.
No nos damos la libertad de estar en el lugar que queremos, de ser quienes somos.
Ser Autodependiente significa ser auténticamente el que SOY, actuar auténticamente como ACTÚO, sentir auténticamente lo que SIENTO, correr los riesgos que auténticamente quiera CORRER, hacerme responsable de todo eso y, por supuesto, salir a buscar lo que yo auténticamente crea que necesito sin esperar a que los otros se ocupen de esto.
Un besote para todos.
María........., un besote muy cariñoso para ti de Sonia y mio.
ResponderEliminarTe queremos mucho aunque tu ya lo sabes.
me gusta equivocarme, tropezar dos veces en la msma piedra, y aunque esto me cueste alguna lágrima lo prefiero a que alguien me diga lo que tengo que hacer, cuando ni tan siquiera me conoce. Mis errores forman parte de mi enriquecimiento como persona. No soporto los libros de auto ayuda. Sigo tu andadura. Cariños.
ResponderEliminarNo creo que tropezar continuamente sea un buen aprendizaje. Es cierto que el enriquecimiento que obtienes ante un error es mayor que ante un consejo, pero eso es porque el dolor, del error cometido, hace que se te grave con más fuerza.
ResponderEliminarAdemás (jeje,) ¿cual es el animal que tropieza 2 veces con la misma pierda?: Nosotros!!!, jajaja.
Bueno, y 2 veces . . . 3 . . . 4 . . . . .
Besos.
Yo tambien os quiero muchisimo a los tres...!!!! Mil besazos!!!
ResponderEliminarHay muchas personas dependientes,que no saben estar solas o que necesitan la aprovacion de sus amigas para ser felices.Y es muy dificil abrirles los ojos.
ResponderEliminarBesisss